domingo, enero 15, 2012

Sobre el 2011 y todo eso que dio hueva.

Este post no lo hago con la mirada nostalgica que ha caracterizado al blog en años anteriores, es posible que debido a las circunstancias que me hicieron cambiar de trabajo al termino del 2010, fueron las que propiciaron cierto estancamiento en mi situacion social, economica, familiar, deportiva y ¡Demonios! hasta en la música, solo fuí a un festival y disfrute poca música.

Conocí Tapachula, Tuxtla Gutierrez, Monterrey, Saltillo, Matamoros y de forma sorpresiva Tampico; dejandome claro que fue el año más largo del sexenio presidencial, en cuanto a la tensión provocada por la violencia y sangre desparramada  a lo largo del país.

El 2011 solo transcurrio para plantearme la manera, en que debo enfrentar lo que me queda por delante y que es bastante; aún así, lo veo con mucha esperanza.

Todavía no entiendo a las personas que ansian viajar y recorrer el mundo, admito que es algo que motiva, pero se ha convertido en un discurso gastado, creo que ya lo escucho como una frase hueca.

No entendí ciertas cosas que hacen los jefes de familia.
 

Presencie la distancia entre felicidad y falta de amor propio.

Por mi parte, me di cuenta del alcance de una caricia bien puesta, de las amistades peligrosas y las amistades frivolas (ya escribire más sobre el asunto).

Tal vez, no es lo que obtuve en el año, sino lo que tuve que dejar pasar.



Lo siento May, por todo.

Fair Weather Friends (Nunca fuimos amigos)

 Uno siempre quiere ser cortés, accesible y flexible; tratamos de encontrarnos con aquello que nos hace sentir plenos o al menos alegres de ...